Dreamers of Decadence

DREAMERS OF DECADENCE

Fotografías de Helena Aguilar Mayans

Del 27 de septiembre de 2019
al 3 de noviembre de 2019

Helena Aguilar Mayans es una fotógrafa que trabaja en el ámbito de la fotografía artística. Vive y trabaja en Olot, dentro del Parque Natural de la zona volcánica de la Garrotxa, rodeada de naturaleza. Siempre se ha sentido fascinada por el paisaje tan singular de esta zona.

Su trabajo constantemente busca la relación entre la naturaleza / ruinas y la humanidad. Entiende la fotografía como algo mágico, alquímico… Le encanta perderse por bosques y descubrir lugares abandonados. Sus fotografías son una puerta a otras realidades. El tiempo, la feminidad, la pérdida, la decadencia, las épocas pasadas y la magia son otros temas concurrentes en su trabajo. Algunas de sus fuentes de inspiración son las hermanas Brontë, los Románticos, los Prerrafaelitas, los estetas, los Simbolistas y los Decadentes.

«Dreamers of Decadence» es el título de un libro escrito por Philippe Jullian sobre el movimiento simbolista y decadente a finales del siglo XIX. Tomando como referencia las corrientes artísticas mencionadas, este proyecto pretende explorar la estética de estos movimientos así como el concepto de decadencia como forma de evadirse y ensoñación. Lugares abandonados donde la naturaleza va recuperando su espacio de nuevo y personajes femeninos inspirados en los trabajos de los estetas, los simbolistas, los decadentes y todos los temas del «fin de siècle» crean estas escenas que funcionan como una evasión del mundo moderno. Estas mujeres también se inspiran en personajes femeninos que formaron parte de estos movimientos y promovieron una liberación para las mujeres a través del arte y la cultura.

 

El siglo XIX se extingue, y Europa se hunde en el humo de la industria. Subyugados por nuevas máquinas y al abrigo de viejas academias, los imperios extienden tentáculos avariciosos sin saber que el mundo a dominar derrumbará pronto en la Gran Guerra. Algunos artistas lo intuyen y levantan bellos refugios donde el exceso, último reducto frente al desastre, se convierte en sagrado. Desde sus interiores cubiertos de esmaltes y camafeos, alzan la voz los apóstoles paganos de las nuevas sensibilidades fin de siècle: parnasianos, simbolistas, dandies, decadentistas, esteticistas, femmes fatales … todos y todas alaban una antigüedad más antigua que la de las iglesias y las leyes, un hedonismo más allá del placer, y una realidad llena de grietas desde donde ver otra realidad, invisible, dionisíaca. A sus salones danzan faunas somnolientos, sádicas princesas y esfinges coronadas, se sienten los perfumes de las flores del mal y del opio, y el verde del ajenjo se confunde con el de las esmeraldas orientales. La noche, despierta tanto por la luz de gas como por la razón y el mecanicismo, convierte la mezcla de sombras profundas y chispas hirientes que llamamos contemporaneidad. Tres gritos lo profetizan a finales del siglo XIX: la sirena de la fábrica, el agónico canto del cisne de los artistas «fin de siglo», y el chillido sordo y oscuro que Edvard Munch pinta en un rostro cadavérico abocado al fiordo que aún hoy es el abismo de todos los temores.

La artista Helena Aguilar Mayans (Olot, 1989) convoca los espíritus de aquellos movimientos que entendieron tan bien que todo esplendor encierra indefectiblemente su final, que la belleza puede brillar desde las joyas o desde la purulencia de llagas abiertas y que la nostalgia no es un estado, sino una actitud. Una disposición, pese a lo que pueda parecer, más del presente que del pasado, esta es la lección estética. Las imágenes de Dreamers of Decadence se construyen desde el anacronismo y la paradoja: fotografía analógica en tiempo de nebulosos limbos digitales, palacios abandonados embellecidos por la vejez, jóvenes en la flor de la vida vestidas con las ropas de fantasmas prisioneros en el éter del sueño y el recuerdo. Así, cada pieza de esta exposición es la estrofa de un poema decadentista; recitado convenientemente, por un lado es capaz de convocar a los muertos que un día afilaron las armas del arte para tomar conciencia de los retos de su tiempo, y por otro, aquí y ahora, avivar nuestras miradas contemporáneas. Esta es, precisamente, la nostalgia fin de siècle, la capacidad de girar los ojos hacia otro lugar para intensificar la experiencia del presente, y este es el muelle emocional y artístico de la obra de Helena Aguilar Mayans: tal como en una séance o sesión espiritista, penetrar nuestros cuerpos y nuestras mentes con ecos que todavía tienen mucho que decir… y despertar nuestras voces propias.

Pere Parramon (Gerona, octubre de 2018)

Galeria Fotográfica

Exposición:

Dreamers of Decadence

Fechas:

Del 27 de septiembre de 2019 al 3 de noviembre de 2019

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